Me estaba acordando de una hermosa película: "Códigos de Guerra", donde el Ejército norteamericano había incorporado a sus filas a personas de la tribu Navajos para implementar esa vital herramienta, la comunicación; en este caso en la lengua nativa de estas personas, para conseguir que el enemigo no interceptase sus mensajes.
Códigos... La importancia de los Códigos.
A lo largo de Historia, se ha recurrido a infinitos modos y medios de comunicación; encriptados, señales con las manos; eso sí, tratando de estar atentos y no parecer espásticos o una versión incompleta de sordomudos!.
Pero están los otros códigos que nos permitirán que ese tipo de códigos "funcionen"; como la disciplina, entrenamiento y comprensión de ese nuevo mecanismo que nos pueden ayudar a lograr con éxito una Misión.
A veces, las más de las vecess, no nos damos cuenta que nos movemos por la vida a base de códigos. La convivencia, en cualquier ámbito, nos lleva a aprender a aplicar determinados códigos de conducta que, según los incorporemos en nuestro diario vivir, encontraremos que ya están dentro de nosotros y nos desplazamos por la vida bajo esa cantidad de códigos.
Son los infinitos "idiomas" con que "hablamos" con nuestros entornos. Desde la actitud corporal que manifestamos según la situación hasta los otros tantos modos que disponemos para expresarnos.
Para que exista un código, deben haber como mínimo un "transmisor" y un "receptor" y, el conocimiento mutuo del elemento a comunicar. Mal puede un Efectivo tratar de comunicar una señal si su potencial "receptor" no tiene conocimiento del método del mensaje.
¿De cuántas maneras nos comunicamos cada día; y, sobre todo, hoy...?
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ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
14/08/11
ESA DELGADA LÍNEA… ¿QUÉ PASA CUANDO EL ESTRÉS EXISTE ANTES DEL CONFLICTO BÉLICO?
Se habla mucho sobre los síntomas, posibles tratamientos para el síndrome de estrés postraumático; pero, qué pasa cuando el estrés está, existe mucho antes de entrar en acción?.
Si nos fijamos, ya el entrenar para responder para una acción Militar, está la especialización, la instrucción, el ejercicio constante que le va a dar, al Efectivo, una posibilidad de incorporar esa instrucción tantas veces hasta que accione según lo que se presente. Y, aunque en ese período de instrucción, no está bajo fuego enemigo, sin situaciones imprevistas; con exceso de municiones y bajo la mirada próxima del instructor….Ya está bajo momentos, situaciones de estrés!.
¿Se tiene en cuenta este detalle?.
¿Se observa cómo va respondiendo, ese Efectivo, ante cada práctica programada?.
¿Se lo prepara, psicológicamente, para situaciones , tal vez poco comunes, que se le puedan presentar y/o presenciar?.
El síndrome de Estrés postraumatico, es el resultado de uno a varios, tal vez muchos elementos, situaciones, personas que van generando estrés.
El estrés, es un timbre de alarma que recibe el cuerpo según órdenes de la mente; miedo, desconocimiento; presiones por la exigencia de respuestas que no están previstas. El tener que cumplir un objetivo y el tiempo que se hace rápido y así, infinidad de “aguijones” afectando el sistema nervioso. O sea, que ese cuerpo, ya va experimentando un desgaste que hay que tener en cuenta; para, de antemano, ver de prepararlo, fortalecerlo para que su nueva ejecución de acción le encuentre “preparado” y resistente para todo lo que tenga que realizar.
Al Efectivo, hay que identificarlo desde antes si está en condiciones para lo que deba realizar. Y prepararlo, a consciencia para que se sienta seguro; resistente a todos esos “cambios” de los que será testigo y temporal habitante de un lugar que no es el suyo. Su mejor más "aceptable" posibilidad de aceptar y adaptarse a esas muchas nuevas situaciones por las que puede experimentar. Informarle que así como aprendió a disparar, a desplazarse sobre un territorio; a lograr cumplimentar ciertos objetivos….Los otros, los enemigos, también han tenido su instrucción y, que también disparan, sienten, sufren y demás. Que, si a su compañero de tareas le pasa algo, o a sí mismo, es parte de una realidad de acción para la que fue designado. Que sí hay heridos y también muertos. Lo que afecta, es el no comprender de las muchas cosas de las que puede ser testigo presencial. El estar preparado, si no para todo, por lo menos comprender que, aunque no entienda, debe seguir y que lo puede hacer.
El estrés, su origen y acción dentro de cada acción, además que afectar a todo el organismo, se debe a la desinformación; y se atenúa su poder, con la consciente preparación individual, sabiendo que, además de la instrucción, que es más que valiosa, la práctica, la determinación; el Efectivo, debe y puede contar consigo mismo!.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
13/08/11
¿Qué día es hoy…?.
¿Qué hora es…?.
¿Estamos y vivimos, hoy?.
¿Cuántas veces nos “perdemos” en el “ayer” de muchas cosas; y cuántas veces más nos queremos “asomar” a las cosas, posibilidades futuras?.
Pero, ¿Y qué hacemos con el “hoy” de nuestro “Hoy?.
Si nos fijamos, nos pasamos la Vida, desplazándonos en tiempos que no tienen sentido que “fijemos” nuestra atención, energía y, más aún, decisión!.
Si es por el Pasado, perdemos el tiempo recordando y repasando imágenes de situaciones que retuvieron nuestra atención; la mente nos juega malas pasadas, por el caudal de sentimientos que se acumulan. A veces, las interminables preguntas que empiezan con un “…Y si hubiera hecho esto”?;
“…Y si hubiera dicho esto otro?. Y así, “interminables” planteos en el aire que arrastran nuestra atención!.
Si es por el Futuro. ¿Qué y cómo podemos precisar lo que se puede presentar en base a ciertas posiblidades de lo que tenemos medianamente previsto?. Y, otra vez, entrar en zozobra; interminable torbellino de pensamientos y planteos que, quizás, y muchas veces después comprobamos que, todo lo que teníamos previsto sobre una o varias situaciones, sus resultados se presentaron de otro modo, tal vez muy distinto a lo que se tenía “previsto”!.
¿Qué resulta de estas dos posibilidades?: Que hemos gastado energía, tiempo y dedicación en cosas, situaciones y sentires distintos!.
Y, sacando estos dos “estados” de tensión… ¿A dónde fue a parar nuestro Hoy?.
Más de una vez, cuando nos permitimos “detenernos” en nuestro “Hoy”; descubrimos que estamos paraditos en una nada y con una sensación de vacío extraño porque nos estuvimos ocupando en los “Pasados” y los “Futuros” que nos agotaron pensamiento, sentimiento y acción!.
Y, ahora, ¿Qué podemos hacer…?.
Aprender a identificar la “Magia” de todo lo que nos puede representar y podemos hacer por nuestro “Hoy”!.
EL Hoy, donde podemos identificar nuestros potenciales creativos que nos pueden impulsar a hacer y realizar maravillas en nuestras Vidas!.
Sí, todo es necesario; nuestros “Pasados” que, si supimos aprovechar las experiencias, sin que nos diéramos cuenta, fueron el “trampolín” para avanzar a nuevas vivencias; y, en ese “desplazamiento” de sensaciones, fuimos forjando nuevos “Futuros”. Que, en su momento, se transformaron en pequeños trocitos de “Hoy” para, luego, fugazmente desplazarse en “Pasados”.
Así como retenemos detalles de “Pasados”. Si prestamos atención en la intensidad de esos momentos, eso generó una íntima decisión por conservarlos; claro que, muchas veces, tendemos a retener aquello que nos hace sentir cosas “Inconclusas”; es como si reservamos esa cuota de penas por si se nos presenta algo lindo.
Se nos acostumbró a que no está tan “Bien” eso de ser feliz.
Ahora bien. Hoy, aquí y ahora: ¿Qué tal si decido estar y sentirme más que bien?. ¿Qué tal si permito que detalles del Pasado se deslicen, suavemente, de mi foco de atención?. Lo que pasó, pasó.
La estrategia consiste en identificar qué es lo que puedo sacar en limpio de lo “Pasado”; y, girar mi atención hacia nuevas propuestas, propias o que se presenten para forjar, afianzar y dar la bienvenida a mi inédito, y… ¿Por qué no luminoso y pujante y creativo “Hoy”?.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
19/07/11
¿Qué pasa cuando, más de una vez, escuchamos, leemos y nos quiere convencer, la Psicología moderna, que debemos recurrir a yoga, control mental; alguna actividad recreativa, cuando adentro nuestro tenemos un “Volcán”?.
Eso, el “enojo”, debemos controlarlo nosotros mismos!.
Buscar el “orígen” que provoca nuestros “enojos”.
¿Tal vez algo que debimos decir y no lo dijimos a tiempo?.
¿Tal vez ese tiempo que ocupamos en “otros” y, aunque el resultado fue satisfactorio, no fue reconocido?.
Debemos aprender a “medir” nuestros tiempos. Qué porcentaje para los demás y qué porcentaje para nosotros mismos.
¿Hasta dónde “cedemos”, sin darnos cuenta?.
Pues, entonces, no nos “enojemos”!.
Seamos inteligentes y equilibremos todo lo que hacemos!.
El día, tiene veinte y cuatro horas, ¿Cómo lo administramos?.
Volvamos a la pregunta del millón:
¿Qué nos “enoja”?.
¿Qué indiquemos algo, que sabemos que el resultado “funciona”, y no se nos “escucha”?.
Cada vez, es más común!.
¿Es, acaso, que hablamos otro “idioma”?.
Si identificamos que no podemos lograr la misma “frecuencia” de comunicación, ¿Qué hacemos?.
¿Tratamos de hacernos entender, o nos “enojamos”?.
Lo más cómico, y triste, es que gastamos energía para nada, nos “desgastamos”; según otros, nos portamos “mal” y no logramos nuestro objetivo!.
El dominio del “enojo”, el triunfo sobre él, es hallar la medida justa entre la situación, en qué grado de importancia o “fase” nos encontramos; si vale la pena actuar y, sopesar esa situación si realmente vale la pena!.
Debemos comprender que no somos los “otros” y, que esos “otros”, las demás personas tienen una óptica de Vida diferente, nada más.
Inteligente postura es identificar esto y comprender que, lo más importante, es tratar de vivir de modo armónico y…Evitar los “enojos”!.
No es dejarse llevar a la deriva; ESO SERÍA NO HACER HONOR A LA Vida!.
Es comprender que podrán haber cosas, situaciones que no nos gusten; no por eso debemos “castigar” a los demás y “castigarnos”. Eso, no es inteligente.
Lo inteligente es identificar cada situación, sopesar sus implicancias y ver si realmente vale la pena el desgaste energético de un “enojo”…Y actuar!.
Así, con el tiempo, nos volveremos más “sabios”; manejaremos mejor los tiempos, para otros y los nuestros y comprenderemos, observando; sopesando y sintiendo cada situación y veremos cómo se irán “desintegrando” nuestros mal manejados “Enojos”.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
23/06/11
En toda instrucción, los pasos, son los siguientes:
Aprender, comprender e identificar sobre qué trata la instrucción; y, más luego, su aplicación.
En toda instrucción, mi lema, es: “Si aparece alguna duda, esclarecerla en el momento”. Esto es para que, en un futuro, su aplicación sea segura y concreta; y, así, evitar errores que podrían complicar cualquier situación.
Prestar atención a cada detalle, fijar la información adquirida; identificar el propósito y prepararse para su eventual aplicación.
En toda instrucción existen puntos, detalles “fijos” y otros “Mutables”; es decir, con posibilidades de cambio sobre la marcha.
Hay que tener en cuenta que, de lo “estático” del período de cualquier instrucción; deberemos pasar, tal vez y sin aviso, a lo “dinámico” de una acción.
Entonces, ¡A estar preparados!.
Hay que tener en cuenta que, para cada Misión, existe un alto porcentaje que, por su dinamismo de acción, “escapa” a lo mucho que se pensaba aprendido.
Entonces, también, hay que aprender a ser “dinámico”.
Cada situación presenta modalidades distintas y no podemos darnos el “lujo” de, estando ante un enemigo que nos quiere disparar, decirle:
-¡Alto!, ¡Eso no aparece en el Manual de Instrucción!.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
05/06/11
La práctica debe ser una constante, sobre todo en Milicia, para estar alertas, en todo momento, de nuestro entorno, de nosotros mismos. Y, para afianzar eso nuevo que hemos aprendido, hasta que se hace fluido en nuestros movimientos y hasta en nuestra manera de pensar.
Conformarnos en un “Todo” con ese nuevo bagaje de instrucción que vamos incorporando a nuestro sistema de Vida.
Cada vez que se nos instruye y aprendemos algo, no debemos limitarnos sólo al momento y tiempo de la instrucción.
Por supuesto que no precisamente si se trata de Instrucción de Tiro; pero sí, de todo lo demás!.
Y toda práctica se asimila mejor cuando, para comprender todos los matices de una instrucción, nos concentremos para fijar nuestros potenciales para “introducir” esa nueva instrucción, en todo nuestro Ser.
Es identificar y aceptar y colocarnos una nueva “armadura” , sutil pero fuerte. Existe si la aceptamos.
La práctica, importante ejercicio físico, mental y hasta espiritual.
La práctica de todo y cada cosa que nos propongamos, nos provee de seguridad en lo que hacemos; y, con más ganas de hacerlo más!.
Hoy… ¿Qué hemos practicado?.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
05/06/11
Es sabido que, en toda instrucción y preparación de una misión, existen una serie de estrategias a seguir, según la geografía y las posibilidades conocidas y presentes. Sí, es muy importante a tenerlas en cuenta…
Eso entraría en el conocimiento de lo previsto.
Pero, ¿Se tiene en cuenta lo “Imprevisto”?.
La vez pasada estaba leyendo un Manual de Instrucción Militar donde, un capítulo, trataba sobre “Franqueo”. Leí todas las instrucciones de movilización y me parecieron excelentes!.
Más luego, me puse a pensar: “Una cosa es, por la experiencia de la Milicia, saber qué hacer ante cada situación; pero, ¿Y si en la realidad, de una situación particular, las cosas se presentan de un modo diferente?”.
¿Lo tendríamos previsto?.
Siempre pienso que hay que ir más allá de todo lo conocido.
Adelantarse a las posibilidades, sobre lo ya conocido, para dar paso y tiempo para estudiar qué puede presentarse como modalidad de “imprevisto”.
Saber con qué cuento, qué sé y qué puedo y debo hacer; y, prepararme para todo lo posible que no haya pensado ni previsto.
Sí, las estrategias básicas pueden sufrir un cambio-giro diferente; pero debo estar más preparada y dispuesta a esos imprevistos para agudizar mis sentidos, mi instrucción; mi sentido común para lograr mi objetivo.
El desafío es transformar los “imprevistos”, en situaciones previstas.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
05/06/11
Se podría entender como “enemigo” a aquella persona que perjudica intereses; y, encima, requiere mucha atención!.
Primeramente, ya está identificado como tal; paso siguiente: ¿Le conozco?. ¿Sí?, ¿No?, ¿Qué hago para reducirlo?.
Si se es y se tiene mentalidad de “Guerrero”, debo identificar si ese “enemigo” también, a su modo, lo es. Entonces, merece respeto.
Pero, se presenta que debo ver el modo de que ese “enemigo” no consiga lo que se propone. ¿Qué hacer?.
Para eso, debo investigar sus movimientos, qué acostumbra, sus creencias; su geografía, su historia, tanto bélica como civil; y, sobre todo y más importante: A qué le teme!.
Mientras más se conoce del potencial del “enemigo”, más armas de estrategias cuento.
Para eso, aunque me lleve algún tiempo, puedo aprender de la “esencia” de ese “enemigo”.
Saber qué lo hace fuerte y qué lo debilita.
¿Cuál es mi propósito y cómo lograrlo?.
¿Cuento con los medios necesarios para lograrlo?.
De no ser así. ¿Puedo procurarme de esos medios, según se presente la situación, para lograrlo?.
Mientras más conozco al “enemigo”, más aprendo de él; y, pensando casi como él, me puedo adelantar, estratégicamente, a sus movimientos.
Y, para que el propósito tenga posibilidades de éxito; debo ver, al “enemigo”, como un digno obstáculo de constante entrenamiento para lograr el propósito.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
05/06/11
Es más que importante disponer de la posibilidad de práctica de tiro. Claro que, en los primeros tiempos, deberemos practicar para dar en el blanco y… Sobra munición…!.
El blanco está “quietito”, esperando paciente, a recibir los impactos hasta que el practicante y, sobre todo, su instructor estén conformes.
Ráfagas cortas, largas; de frente, en barrido; de pie, con rodilla apoyada, de panza. El arma en alto, a la altura de la cadera, etc..
Es muy buena e importante la práctica. El asunto es cómo responderemos ante una verdadera incursión!.
¿Estamos preparados?.
Muy distinto es el haber practicado con blancos “estancos” a cuando el objetivo se está moviendo a cada rato, o está escondido; y, encima, nos dispara!.
En una incursión de “verdad”; además de saber disparar, tenemos que tener en cuenta que, el objetivo, también nos puede disparar.
¿Estamos preparados?.
Otro detalle: La municiones. ¿Las sabemos administrar?.
Es importante, siempre, saber con qué recursos contamos.
Es posible que, si nos ponemos “generosos” en disparar por todos lados, es seguro que alguna bala haga impacto; pero, ¿Y todas las demás?.
¿Podré conseguir más municiones, más luego?.
¿Y si me encuentro en una posición en la que no tengo cómo recurrir a quién? , ¿Qué hago?.
Pienso que todo Efectivo, en práctica o en una Misión, debe tener un “algo” de ser y sentirse francotirador. Por la concentración de lo que está haciendo, el desafío de lo que está logrando y…Por ahorro de munición.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
05/06/11
¿Qué entendemos por tolerancia?
- Aceptación paciente!.
Podremos no estar de acuerdo con alguien con algo, puede no gustarnos; pero, podemos aplicar la tolerancia para hacer más llevadera una tarea!.
Estuve viendo, otra vez, la película: “Códigos de Guerra”. El Ejército había alistado a unos Indios Navajo para evitar que los Japoneses interpretaran sus mensajes. Muy inteligente por cierto; pero, descuidó un factor importante: La tolerancia de algunos soldados ante la presencia de esas personas Navajo. Otro error garrafal fue que no explicaron, a la Dotación, de la importancia de la presencia de esas personas Navajo para lograr protegerse de los Japoneses en cuanto a comunicaciones.
Es cierto que existen ciertas “fases” de información, para la Dotación, en una Incursión. El Oficial al mando, con la responsabilidad de la Orden e información que porta, más lograr que la Dotación “funcione”, como conjunto; y, por otro lado, la Dotación estar siempre presta y alerta para seguir las órdenes de su Superior y cumplir, del mejor modo posible, todo aquello que se le presente y se le ordena.
Pero… Hay algo que debe tenerse en cuenta; desde antes, mucho antes de toda maniobra por realizar: El presentar, entre sí, a los integrantes de la futura y posible incursión. Aclarar los espacios-tiempos-cargos y respeto de cada una de las partes.
Si se observa intolerancia de algún aspecto, de los posibles integrantes, pero que por su capacidad son importantes; tratar de que se “limen” las más “asperezas” posibles para que, una vez aclarado y solucionado esto, se dediquen a las tácticas de la Incursión a llevar a cabo.
Si alguna de las partes está “descontenta”, no realizará a pleno su tarea y bien puede “desconcentrar” al grupo y echar por tierra el éxito de cualquier Misión.
Se cumple y obedece mejor, y estando de acuerdo todos, cuando se entienden las cosas y se toma, como objetivo, el éxito de una Misión.
Realmente…
¿Somos tolerantes?.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
05/06/11
Primeramente, es una Vocación.
Es esa inquietud que va más allá de las muchas posibilidades.
Existen casos en que se ingresa, a la Milicia, por infinitos motivos y que, con el paso del tiempo y de la Instrucción, se transforma en fuerte vocación.
Esta decisión nos “aleja” de muchas cosas “civiles” que, aunque se pueda transitar en diferentes ámbitos, nos vamos dando cuenta que nuestro corazón palpita al son se una marcha, un ritmo; una formación que, una vez aprendida y asimilada, no queremos dejar.
Algo importante: Forja el carácter!.
Ser militar, es mucho más que un uniforme o un arma.
Es como una especie de Colmena, donde se habla y se actúa y se siente de un modo diferente y particular.
El grado de comprensión sobre las cosas toma una dimensión más fuerte y en contínua expansión.
Cada Arma se maneja con sus códigos propios; pero, a la vez, es pieza vital de ese todo maravilloso que es la Milicia.
Desde hace mucho, muchísimo tiempo, que visito todo tipo de páginas, que traten sobre Milicia, en Internet. Y, con el tiempo, adquirí la delicada, y hasta difícil de explicar, capacidad para identificar las de la verdadera Milicia y las que no.
Respeto eso porque son diferentes modos de presentar y expresar sobre el tema; porque me dan la posibilidad de identificar las marcadas diferencias de enfoque de personas simpatizantes, Militares y las que, definitivamente, no.
El sentir Ser Militar, sólo puede entenderlo otro Militar.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
05/06/11
Hay una Misión, debemos llegar hasta cierto objetivo. La clave es acceder al punto justo para lograrlo, pero… ¿Cómo?: Del mejor modo posible!.
Es ahí que, además de toda la instrucción adquirida, debemos tener la capacidad de adaptar nuestra indumentaria acorde al “paisaje” donde debemos movernos.
Toda “Geografía”, presenta su desafío!.
La palabra camuflaje proviene de la palabra francesa “camoufler”, que significa “disfrazar”. Y, mimetismo, es engañar a los sentidos que afectan a la percepción visual, en este caso; pero también hay ejemplos de mimetismo auditivo, olfativo o táctil.
Si nos fijamos, existen situaciones y mil modos, de diferente envergadura, para aplicar un “camuflaje”. Esto lo comprobé cuando estaba en la India. Está bien que me gusta la Antropología; es un modo de comprender mejor, si se da la posibilidad de encontrarse en una “Geografía” muy distinta a la que acostumbro, cómo “funciona” esa Geografía!. Al observar ese nuevo entorno, comencé a aceptar el desafío de “camuflarme-mimetizarme”, en mi aspecto externo, para identificar mejor cómo era el “Mundo” de esos habitantes con los que convivía de un modo temporal. Era un “mimetismo” más rural que urbano, por la zona donde me encontraba. Fue la mejor posibilidad que me dio la Vida, para aprender los muchísimos matices de esas formas de Vida, bastante diferentes a la mía.
Son asombrosas las posibilidades que se presentan cuando se dispone la voluntad, el propósito y los medios para utilizar el infinito Mundo del Camuflaje!.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
30/05/11
Estaba leyendo una nota, española, sobre un nuevo Sistema “Combatiente Futuro”; cuya sigla es COMFUT, …”para dotar al Ejército de un equipo de protección individual de máximas garantías y con mayores capacidades para defensa y combate, que será desplegado en misiones de mantenimiento de paz en el exterior a partir de junio de 2011”.
Según la foto de tal “indumentaria” y todos sus dispositivos, es como recordar la serie televisiva “Robocop”, pero en versión militar.
Observando mejor la indumentaria, si comenzamos a sacarle el visor nocturno, sensores de salud del soldado; localizador, etc.; podemos notar que vuelve a la normalidad del uniforme tradicional.
Digamos que es el “entusiasmo” por la novedad, de esta indumentaria especial, que sería el último grito de la Moda Bélica!.
Ahora, remontémonos a los tiempos antiguos, donde el soldado apenas contaba, además de su ropa, de su valor, su instrucción; algún elemento de defensa….Y su propósito!.
Sin faltar al Progreso, que es importante, me puse a pensar sobre este gran adelanto tecnológico para actividad bélica. Es como si mostraran los beneficios de un modelo de Rolls-Royce, de última generación y detallando los beneficios aplicables, a que tener un Fiat 600.
Tengo entendido, según la nota, que todos los adelantos de esa indumentaria especial es, sobre todo, para Oficiales al Mando, para comunicarse entre ellos. Muy bien; pero, pensándolo bien, deberán recurrir a los métodos anteriores de comunicación para poder impartir instrucción a los soldados!.
La nota comenta que, esta nueva indumentaria, tiene un peso de 30 kilogramos. Eso, es factible de resistir…Estando de pie y “tranquilito”!.
Ahora bien, pasemos a cuando el Efectivo debe entrar en acción: A medida que se vaya desplazando, se incrementará el peso transportado. Eso está demostrado en la Física, en mecánica clásica. Si el Efectivo se mueve sobre terreno plano o con ciertos relieves; el esfuerzo, es distinto.
En toda instrucción militar, sobre todo en el Arma de Infantería, es de vital importancia que el Efectivo aprenda, a la perfección, a maniobrar el arma que sea, tanto con su mano derecha o con su mano izquierda; hombro izquierdo o derecho y desde y en cualquier posición de su cuerpo; igualmente si estamos hablando para lanzar granadas, dispositivos incendiarios y/o elementos afines. Aquí, estamos tratando sobre un móvil-elemento único y más que importante: Su cuerpo!.
Si nos fijamos en esa nueva indumentaria, teniendo en cuenta el eje central del cuerpo, en este caso, del efectivo; de los dispositivos mencionados, su ubicación comprende, por utilidad o factible uso, sólo uno de sus costados. Es comprensible.
En lo teórico, es interesante y novedoso. En la práctica, habría que ver…
Pasemos al ejemplo en que, este nuevo “Guerrero Universal”, con su extraña y futurista armadura, resulta que su destino de acción-misión, para mantener la paz por disposición internacional, está designado a un país con su situación más que “particular”; como puede ser, en la actualidad, la República Democrática del Congo; con sus habitantes tan especiales, con su idiosincracia propia de sus Tribus, y que luchan con los elementos que tienen y a su modo. Los mueven sus propósitos y, su indumentaria de combate, es lo que tienen puesto y a la mano.
Si comparamos la parte externa, su indumentaria: Los habitantes del Congo; más livianos de ropas, más agilidad. Movilidad….Y ser nativos!.
El Efectivo recién llegado, además de conocer poco sobre todo lo del lugar, debe lograr el “maridaje-adaptación” entre su cuerpo, sus reflejos y su nueva indumentaria; y, no tanto sobre su efectividad; sino, sobre su aplicación.
Espacios abiertos, o cerrados (zonas pobladas, construcciones, más riesgos de emboscadas); el espacio “físico” del entorno y el espacio propio que ocupa, el Efectivo, para lograr su misión.
Los dispositivos, ultramodernos. Resulta que, por alguna situación del momento, perdimos el casco; debemos comunicarnos de algún modo, nos hemos desorientado y la situación es crítica. ¿Qué hacemos?. ¿Podemos, con tanta instrucción de dispositivos modernos, recordar a como hacíamos antes cuando teníamos medios no tan sofisticados pero que nos las arreglábamos y lográbamos el propósito acordado?.
Sí, es cierto que hay que darle la bienvenida al progreso y que hay que estar actualizados, pero, sin dejar de lado todo el incomparable aporte de instrucción y medios de la Milicia de otros tiempos.
No debemos olvidar, ni dejar de lado a nuestros maravillosos, únicos y valerosos “Fiat 600”!.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
24/04/2011
Una característica importantísima del estrés post-traumático es la experimentación de un hecho.
Las causas pueden ser de muchas calidades y variedades y que repercuten en la persona, según la edad, la situación y su respuesta ante ese estímulo, en este caso, negativo.
La persona tiende a evitar estos estímulos que lo llevan a revivir la experiencia. Lo que sucede es que, su mente, registró y fijó una serie de sensaciones y sentimientos normalmente encontrados; como contraórdenes a sus patrones mentales establecidos. Eso le descoloca y, entran en juego fuertes sensaciones de abandono; desorientación y limitación para responder a ese nuevo estímulo.
No es la situación en sí lo que determina el trauma; sino, la vivencia de ésta. Aquí, importante es identificar algo que le faltó a la persona desde un principio: Estar preparado. Estar informado y conocer cuáles son sus posibilidades para salir adelante ante una situación o situaciones que se le presenten.
¿QUÉ ES LO QUE PROVOCA EL ESTRÉS?
Antes que nada, es importante determinar si la persona, según su temperamento, ya tiene una predisposición al miedo. Que hace que su respuesta sea completamente desgastante ante una situación que opera de dispositivo para que todo su organismo actúe en concordancia. Estamos hablando de su parte genética, que es la que almacena una serie de informaciones variadas que harán que esa persona responda a cada estímulo de un modo particular.
El estrés es uno de los tantos resultados-respuestas con que la persona manifiesta un desequilibro desde su química particular en su organismo, pasando por las “órdenes” que imparte su mente según su conocimiento de las cosas.
ESTRÉS Y MALA NUTRICIÓN.
Algo que he notado que se habla de estrés y sus resultados en una persona; pero que no se tiene en cuenta la investigación sobre cómo se alimenta esa persona y si se nutre de modo adecuado como para que la química de su organismo esté fortalecido. Somos química, energía, movimiento y…Pensamiento!.
SEGÚN EL CASO, ES EL TRATAMIENTO.
Debemos tener en cuenta que sí es real que, cada persona, es un mundo. Un mundo con sus propios giros, estaciones y tiempos.
Cada persona toma su tiempo para poder asimilar alguna situación que le tocó por vivir; y, tal vez, más para comprender el mecanismo para aliviar esa presión psicológica que le llevó a manifestar una o varias sintomatologías en su organismo y, todo comandado, por su mente.
SEGÚN LA INSTRUCCIÓN, ES LA REACCIÓN.
Distinto actúa una persona que recibió, tal vez, sólo instrucción de libro; y, otra, si recibió instrucción de vida. A esto me refiero si esa persona en cuestión, contó con armas propias de entendimiento e información sobre los riesgos de alguna o cada cosa y si su instinto de conservación estaba “activo”.
ESAS HERIDAS NO VISIBLES…
Importante es poder y saber captar aquellas sutiles señales de que, la persona que vivenció una situación más que especial, está necesitando “algo”.
INSERTARSE EN LA SOCIEDAD.
Me refiero a quienes tuvimos que experimentar ciertas situaciones, fuera del entorno conocido.
En cuanto a tiempo, da lo mismo un año, unos meses o un día. Lo que cuenta es la intensidad de lo vivido... O no vivido.
El lugar. Lo que es conocido y lo que no; y la capacidad y el modo de adaptarse. Si se acepta, se “absorbe” y si se pone voluntad aunque cueste o no.
Y, al volver...
...Las “huellas”. El tamaño de esas “huellas”, marcas o como se la quiera identificar.
No, no podemos hablar de re-inserción a una sociedad cuando hemos vivido, tenido experiencias que nadie puede llegar a comprender.
Ningún Tratado de Psicología puede llegar a identificar, medir ni interpretar, de acuerdo a sus limitadas estructuras; lo que puede sentir, atesorar y demostrar un Ser Humano.
¿Qué pasa cuando el olor del aire no es el mismo olor?.
¿ Dónde está la fruta o hasta la lata de comida que nos alimentó más que el hambre?.. ¿ Cómo le reemplazamos?. Y, si se puede, ¿Cómo y dónde lo conseguimos?.
¿Qué cartilla stándard de estructurados test psicológicos, pueden llegar a identificar o ayudar a “Medir” lo que se ha vivido?.¿Qué pueden entender los cómodos psicólogos de escritorio, que no tomaron compromiso de vivir, de experimentar vivencias propias, de la Vida misma?.
Hoy, el insecto que asustó con su presencia.
Hoy, la sed de experiencias nuevas.
Hoy, el descubrir que somos capaces de cosas bellas por nosotros mismos.
Hoy, sentir la grandeza de un entorno que nos fortalece.
Hoy, darnos cuenta que no estamos solos. Que estamos y somos.
Hoy, el tocar la Vida con todos nuestros sentidos.
Hoy, que nuestra visión de las cosas nos hacen más sabios.
Hoy, que damos más valor a las cosas y ya no somos los mismos.
Hoy, que cambiamos y ya no queremos ser los mismos. Crecimos o no.
¿Cómo explicamos, al entorno, que se amplió nuestra óptica ante la Vida?.
¿Y cómo hacer para fusionar esta nueva vida, recién descubierta y aprendida, con la antigua vida?.
¿Cuánto tiempo nos dan para adaptarnos a lo que hacíamos antes?.
Así, pues; no importa si estuvimos en la India, o en alguna Misión de Paz en algún país en conflicto; o en una Empresa multinacional o, simplemente, en una oficina.
Bueno es preguntarse e identificar, con qué contamos como respaldo afectivo y efectivo y, cuántas estrategias tenemos que aprender y usar por nosotros mismos.
Adriana A. Grossi
19/10/09
COMPRENDER EL MECANISMO DEL ESTRÉS, Y VENCERLO.
El estrés, en este caso, como así otras manifestaciones que desequilibran la armonía de la persona, perfectamente pueden ser erradicadas del diario vivir. Pueden querer instalarse porque, la persona, comunmente, por falta de información y comprensión, piensa que es algo nuevo que tiene que arrastrar y cargar de por vida.
Pues, existen métodos para nada “invasivos” ni agresivos ni desgastantes con los que, la persona, puede avanzar libremente en todo lo que se proponga hacer, avanzar, crear y disfrutar.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
30/09/2010
Tiempo atrás, resultó que fui invitada a un Evento, civil, y que se desarrolló en una Base Militar. Era como estar en una “isla” dentro de un territorio Militar.
La anfitriona, cuando me invitó a tal Evento, me comentó que iba a estar presente un señor militar que había regresado de una Misión de paz en Haití.
El punto de reunión de todas las personas que iríamos al Evento, era la casa de la anfitriona; para, una vez presentes todas las personas invitadas, iríamos en varios coches, como en caravana, al Evento.
Entre todas las personas que estábamos en esa casa, noté la presencia de un señor jóven que me llamó la atención.
Resultó que, este mismo señor, terminó llevándonos al Evento.
La Base estaba casi a oscuras, con su personal de vigilania militar, presente. Había que desplazarse por varias calles cortas para llegar al recinto.
Noté que este señor, a pesar de vestir de civil, no era civil para nada. Su modo de conducir, entre decidido e impaciente, daba la impresión de estar acostumbrado a manejar un Jeep militar.
En un momento en que dábamos unos cuantos banquinazos, (estaban haciendo mejoras en esas calles), le dije: “Usted no maneja como civil”. Se volvió para mirarme y me preguntó que por qué, a lo que le respondí: “Por la forma de manejar”.
Es que se nota, por el modo de manejar, si quien conduce, acostumbra a manejar un ómnibus, un taxi; un remise y, sobre todo, alguna Unidad Militar. Cambia temperamento, actitud; velocidad y, prudencia!.
Ya en la primera parte del recorrido, se identifica de inmediato.
Llegamos al lugar, saludamos y cada quien se ubicó por su lado.
Se dio la situación en que el señor estaba ubicado, en la misma mesa larga, a unas cuantas personas del sector frente a mí, pero que permitía poder observarle bastante bien.
Fumaba unos cigarros finos y de color oscuro tipo “Panatella”, de forma inquieta. Se le notaba “impaciente”, que “estaba”, pero que participaba de “nada” en el lugar.
Sí, era el señor militar que había vuelto de su participación a la Misión de Paz en Haití…
Le comprendía bastante bien porque yo viajaba mucho a la India; y, cuando volvía a mi lugar de nacimiento, volvía bastante….”Salvaje”!.
En cierto modo, cada quien tiene sus “Guerras”!.
Al haber observado a este señor, reflexioné sobre muchos detalles y realicé mi siguiente escrito:
INSERTARSE EN LA SOCIEDAD
Me refiero a quienes tuvimos que experimentar ciertas situaciones, fuera del entorno conocido.
En cuanto a tiempo, da lo mismo un año, unos meses o un día. Lo que cuenta es la intensidad de lo vivido... O no vivido.
El lugar. Lo que es conocido y lo que no; y la capacidad y el modo de adaptarse. Si se acepta, se “absorbe” y si se pone voluntad aunque cueste o no.
Y, al volver... Las “huellas”. El tamaño de esas “huellas”, marcas o como se la quiera identificar.
No, no podemos hablar de re-inserción a una sociedad cuando hemos vivido, tenido experiencias que nadie puede llegar a comprender.
Ningún Tratado de Psicología puede llegar a identificar, medir ni interpretar, de acuerdo a sus limitadas estructuras; lo que puede sentir, atesorar y demostrar un Ser Humano.
¿Qué pasa cuando el olor del aire no es el mismo olor?.
¿ Dónde está la fruta o hasta la lata de comida que nos alimentó más que el hambre?.. ¿ Cómo le reemplazamos?. Y, si se puede, ¿Cómo y dónde lo conseguimos?.
¿Qué cartilla stándard de estructurados test psicológicos, pueden llegar a identificar o ayudar a “Medir” lo que se ha vivido?.
¿Qué pueden entender los cómodos psicólogos de escritorio, que no tomaron compromiso de vivir, de experimentar vivencias propias, de la Vida misma?.
Hoy, el insecto que asustó con su presencia.
Hoy, la sed de experiencias nuevas.
Hoy, el descubrir que somos capaces de cosas bellas por nosotros mismos.
Hoy, sentir la grandeza de un entorno que nos fortalece.
Hoy, darnos cuenta que no estamos solos. Que estamos y somos.
Hoy, el tocar la Vida con todos nuestros sentidos.
Hoy, que nuestra visión de las cosas nos hacen más sabios.
Hoy, que damos más valor a las cosas y ya no somos los mismos.
Hoy, que cambiamos y ya no queremos ser los mismos. Crecimos o no.
¿Cómo explicamos, al entorno, que se amplió nuestra óptica ante la Vida?.
¿Y cómo hacer para fusionar esta nueva vida, recién descubierta y aprendida, con la antigua vida?.
¿Cuánto tiempo nos dan para adaptarnos a lo que hacíamos antes?.
Así, pues; no importa si estuvimos en la India, o en alguna Misión de Paz en algún país en conflicto; o en una Empresa multinacional o, simplemente, en una oficina.
Bueno es preguntarse e identificar, con qué contamos como respaldo afectivo y efectivo y, cuántas estrategias tenemos que aprender y usar por nosotros mismos.
Adriana A. Grossi
19/10/09
Ahora bien, a todos y a cada una de estas personas que vuelven de Misiones así, ¿Quién los contiene?. ¿Quién los apoya?.
Una cosa es la instrucción Militar; pero, una vez que llegan a donde se les ha destinado: ¿Qué esperan encontrar?. ¿Qué les dijeron?. ¿Les informaron?. ¿Qué encontraron?. ¿Qué sintieron?. ¿Qué pensaron?.
Y, lo más importante: ¿Cómo volvieron?
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
26/09/2010
¿Sabemos qué significa la palabra Valor?.
Me refiero a “Valor” de “Valiente”!.
Se nos encomienda una Misión, así sea un simple Entrenamiento.
¿Sabemos cómo vamos a reaccionar ante eso?. Tal vez sí, tal vez no. ¿Quién lo sabe?. ¿Puede, quien se considera “valiente”, ser “valiente”?.
Hasta la persona que menos se piensa, se vuelve Valiente!. Lo importante es qué sucede para que descubramos todos nuestros potenciales para “descubrir” si somos “valientes” o no.
La vida nos lleva a saber sobre esas cosas.
Nada sabemos de cómo iremos a reaccionar hasta que se presentan situaciones que nos llevan a descubrir nuestra valía… Sobre todo y más importante, sobre nosotros mismos.
¿Sabemos cómo somos, cómo reaccionamos ante las situaciones y cómo realmente reaccionaremos?. ¿Nos conocemos?.
Valentía, no es sólo conseguir soluciones!.
Valentía es reconocer que, amanecer cada día, vale la pena!.
Valentía es tener paciencia de identificar que, sobre lo que se nos presenta… Tenemos más posibilidades de solucionar cosas, más allá de lo limitado de nuestros pensamientos.
La valentía, la debemos “permitir” en la medida en que aceptemos que somos capaces de lograr todo lo que queramos; todo lo que soñemos.
Soñar, es crear. Nos hace fuertes y creativos. Reconocernos “Valientes-en-poder-de-Creación”.
La valentía se nos manifiesta, tangible y aplicable, cuando reconocemos nuestros verdaderos potenciales.
Podemos Soñar!.
Podemos Saber!.
Podemos Lograr!.
Podemos Aprender!.
Podemos aceptar y fortalecer… Nuestra Valentía!.
Podemos forjar la potencia de la Valentía!.
ADRIANA A . GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
28/10/10
Se dio la posibilidad de volver a ver la película “La Teniente O´Neill”, (G.I. JANE).
Volvió a llamarme la atención sobre un “mecanismo” interesante:
“Si has tomado compromiso sobre un propósito… No descuides los “detalles”; porque, siempre… “Alguien” mira; y más si eres el “objetivo” para la “puja” de los muchos intereses creados: Milicia, Política; principios varios y demás...”. En caso de estar en una situación así. ¿A quién responderías?. ¿Al “experimento”, a los intereses de la partes actuantes; o, a los propios principios?.
Oh, Sí!. Nunca hay que olvidar algo importante: “Si eres “observado”… NO olvides los “detalles”!.
Sé previsor, observador. Aprende a captar los “sutiles” detalles y los “imperceptibles” cambios. Sé alerta de las posibilidades “inocentes”… Te traerán problemas futuros!.
Sé Alerta, Firme, Decidido. EL campo de “entrenamiento”, es una constante!.
Ahórrate de “descansar” en la “buena” voluntad del entorno. Estás “entrenando”, no lo olvides!.
Que alguien te “sonría”; puede, en un futuro, ser tu mejor y más fuerte “enemigo”.
Sé Dúctil, Amable, Fuerte; pero no dejes pasar ninguna señal como algo trivial y que no tiene mucha importancia.
Observa tu entorno; aprende a captarlo, sentirlo; “olerlo”, porque, el que normalmente viene o le ves “amablemente” inofensivo; puede tener el “levemente” detectable propósito de destruir lo que has logrado.
Aprende a vivir con eso…
Sé fuerte, con la Fuerza completa de “escuchar” con todos tus sentidos.
Sé “Guerrero”; pero un muy buen guerrero. No es necesario que seas “agresivo”, salvo que la situación lo “amerite”!.
Sé correcto con todo y aprende a observar cómo se desarrolla tu entorno y captar el verdadero propósito de todo eso.
Si eres “observado”, es que tienes potenciales; y es importante que los sepas usar.
Los “detalles”…
La observación y captación de los “detalles”, son los que nos hacen fuertes y podemos progresar.
Si eres “observado”; haz tu labor… Y sigue!.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
28/10/10
Paso a comentar que volví a ver un Documental, por TV, sobre un tema interesante: El caso de una Teniente norteamericana que fue picada por un escorpión dorado, en Irak.
Resultó que este “coqueto” animal, por su deliciosa estampa, es de la especie de escorpión más venenosa del mundo. Se le conoce como “Escorpión dorado de Israel”. Propia del norte de Äfrica y Próximo Oriente. O sea, que es un animal que puede hacer “turismo” por la áridas inmediaciones de países como Syria, Jordania, Arabia Saudí, para llegar hasta Irak.
Resultó que la jóven, había comprado unas mantas en el mercado callejero de la zona donde se encontraba. Ya en su tienda, procedió a acomodar las mismas y se dispuso a dormir. Ya entrada su noche, despertó sintiendo que “algo” se movía cerca de su oreja. Desplazó su mano para retirarlo y, sin identificar qué pasaba, sintió una picadura en uno de sus dedos; luego, otra picadura también en su cuerpo. Se levantó de su catre y, moviendo las mantas, pudo ver que en piso se encontraba un pequeño escorpión color ámbar.
Aunque no sentía nada extraño, tomó la decisión de vestirse, colocar en una cajita el escorpión y dirigirse para hacer consulta en el sector de Medicina Militar.
Durante la revisación, se acercó un médico que, al ver el escorpión, se puso más que pálido porque sabía que, de entre los escorpiones de la región, justamente ése, era el más ponzoñoso.
La jóven comenzó a presentar síntomas alarmantes y, el médico, sabía que tenía pocas posibilidades a su favor. En el lugar donde se encontraban, distaba bastante del Hospital donde podría ser atendida. Necesitarían ir en helicóptero a riesgo de entrar en zona de fuego enemigo, más la distancia y el tiempo que llevaría llegar hasta ahí y el estado particular de la jóven.
Todo resultó bien y la jóven logró salvar su vida.
Ahora, pasemos a los puntos importantes a tener en cuenta:
1*) ¿Qué tipo de información se les impartió, en un inicio, a todos los Efectivos que debían ser destinados a ese lugar?. Una cosa es cuál y cuánta información se les provee y, el modo en que se transmite. Luego, si cada Efectivo prestó verdadera atención en su momento y, otra, si se toma el trabajo de estar en una constante “alerta” en cuanto a lo “diferente” que puede haber, presentarse, entre lo que está acostumbrado a conocer y todo lo que se presenta como “nuevo”.
Lo importante, es “Informarse”, no “enfermarse” en el sentido que, se puede caer en la perniciosa “obsesión”. El equilibrio, como debe ser en todo aspecto de nuestras vidas.
2*) Lo acertado, de esta jóven, de ir a consultar sobre su situación-picadura.
3*). Desinteligencia por no revisar los elementos con los que se convive. En India, aprendí muy bien de la importancia de sacudir toda prenda, mantas, equipaje; y, algo más que importante: Revisar a fondo el calzado. Durante los tiempos, momentos “quietos”, es cuando más se corre peligro de contar con silenciosos “visitantes” inesperados.
Este es uno de los casos, que sirven de ejemplo como para poder aplicar mayor atención en todo lo que hacemos, dónde nos movemos; qué actitud tomamos y, lo más importante: Aprender a estar siempre “preparados”!.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
22/10/10
¿Por qué no somos positivos?
¿Es acaso un “Pecado”?
Es importante darse el permiso para hacer cambios; a veces drásticos, para lograr grandes resultados.
Todo cambio sugiere y “requiere” cambios. Hasta, a veces, radicales. La resistencia a los mismos se produce por miedo a lo que no se conoce o no se conocen los resultados. El punto es que, para caminar, primero adelantamos un pie y luego el otro.
El primer “cambio”, es hacerlo a consciencia: Observando, descubriendo, aprendiendo; y, luego, lo más importante:
Eligiendo!.
Lo que se dá, últimamente y como moneda corriente, es la “corriente” sumisa y hasta a veces considerada cómoda hacia lo negativo; lo que no “crece”, lo que no crea.
Bueno, un paso es el darse cuenta de la diferencia de resultados entre actitudes positivas y las que no. Si se lo piensa bien, el gasto de energía, sobre todo mental; ya sea en dirección a lo positivo o lo que no, es casi la misma. Claro que lo positivo “nutre”, lo negativo “adelgaza” todo lo hermoso que cada quien puede lograr.
ADRIANA A. GROSSI
PSICORIENTÓLOGA
