miércoles, 30 de noviembre de 2011

LA PIEDRA EN EL CAMINO

  
   En el día de ayer, camino a casa, pasamos por una zona Militar, cuyo estacionamiento al descubierto, ostenta un maravilloso jardín que representa mi mayor placer. Observando a las unidades estacionadas, me encanta ver a un hermoso ómnibus con su redondita nariz Mercedes Benz y un camión, también Militar, con sus líneas rectas bien Ford!. Lo que me llamó la atención es que, en la parte delantera derecha del camión, frente a la zona de su neumático, había una piedra grande.
   Me hizo pensar en lo que representaba, algo así como: “La piedra en el camino”. Como ese “algo” que no permite avanzar.
   Pero, ¿Por qué no poder avanzar?.
   Si nos fijamos, ¿Quién pone, realmente, “Piedras” en nuestros caminos?. ¿”Otros”, o nosotros mismos?.
   Y, si esas piedras las colocan “Otros”; ¿Nos quedamos “tranquilitos”, estáticos y nos “quedamos” con la remota idea de cómo hubiera sido poder seguir, avanzar?.
   Según la situación, es como vemos el tamaño de la “Piedra”. Si lo permitimos, y nos vencemos, sus dimensiones podrían ser descomunales!.
   Pero, pensemos un poco. Si aceptamos la existencia de esa o esas piedras, es como si no tuviéramos ganas de poder avanzar!.
   ¿Está bien eso?.
   ¿Haríamos verdadero Honor a la Vida o nos dejaríamos “arrastrar” por los acontecimientos?.
   ¿Y, si esa piedra, la pusimos nosotros mismos?.
   Bien podría ser que, relamente, no queremos avanzar por la Vida y nos sentimos “cómodos” con todo aquello que no “empuje” a la acción, a la decisión; a la Vida y, ¿Por qué no?. A la diversión!.
   Quien se siente y está seguro de sí mismo y lo que quiere, tiene ese pequeño detalle, ese pequeño destello divertido en la mirada, que lo invita a siempre avanzar!.
   ¿Piedras en el camino?.
   ¿Y si las bordeamos?.
   ¿Y si las saltamos?.
   ¿Y… Si las hacemos desaparecer?.




     ADRIANA A. GROSSI
      PSICORIENTÓLOGA
              30/11/11