(Todas estas fotos, son mìas).
Me pareció un excelente ejemplo, el de identificar distintos
tipos de nubes, con los pensamientos.
Cuando vemos nubes “gorditas”, como a punto de reventar, nos
da la sensación de algo “vasto”, luminoso; como lleno de sorpresas y, por què
no, alegrìas.
Luego, es como si se sintiera que no està “permitido” el
tener alegrìas y se van “desarmando” el “entusiasmo” y se dejan los sueños.
Màs luego, nos “enoja” esa “interrupción” entre lo diáfano de
las cosas lindas y los permisos que se dan a lo negativo… Y aparece ese
torbellino molesto que no permite concentrarse, ni identificar a què pauta
mental arraigada de “castigo” permitimos a diario y no nos deja elegir estar “bien”.
Y se van “oscureciendo” las ideas de cambios y progresos y
se transforma todo en cosas “pesadas” y “opacas”.
Pero, aunque pareciera todo ser una gran “tormenta” de ideas
negativas, oscuras, etc….
… Si se toma la determinación, con tranquilidad y con la
seguridad de que siempre habrá soluciones para lo que sea…
… Siempre, dentro del “nubarrón” màs apretado… Hay “claridades”
que nos pueden llevar a sonreír.
Y… según se acepten los cambios con determinación positiva…
… Se verà que la nube oscura que tapaba los sueños…
… Se irà para dejar paso a nuevos logros en todo lo que se desee
y se realice.
DE CADA QUIEN DEPENDE CÒMO ACEPTE QUE SEA SU… “NUBE”!.
ADRIANA GROSSI
04/02/18
