lunes, 11 de agosto de 2014

EL CARGO, O… LA PERSONA?.



(He tomado “prestadas” estas imágenes para “graficar” sobre el tema).

Muchas veces, nos encontramos, en el diario vivir, que debemos tratar con muchas personas con distintas actividades. Algunas que “coinciden” con nuestra actividad y, otras… Que “complementan” las actividades que no “dominamos”.

Pues bien, sería interesante que nos acostumbráramos, en todo momento, a la saludable idea de lo que significa “compartir”, “complementar”; “intercambiar” aptitudes; y, sobre todo, tratar, en todo momento, de que todo lo que se deba hacer…. Resulte mucho mejor.

O sea… Que aprendamos, con equilibrio, lo que es “convivir”!.


Se me ha presentado la posibilidad de realizar muchas actividades, en distintas àreas de trabajos y aprender que existen premisas para que las cosas, si es posible todas, “funcionen” del mejor modo posible… Porque me tomè el trabajo de poner voluntad para ello.

Como también, he tenido oportunidad de tratar con personas, de distintos cargos y actividades, en entrevistas y demás y…

… Descubrì que, en muchas situaciones, el cargo de algunas personas, distaba mucho de lo que demostraba la persona… A veces, era un “abismo” que contradecía entre lo que se debía hacer y la actitud de la persona en cuestión…

… Y, muchas veces… Lo resultados… No eran… “óptimos”!.


A veces, el cargo es demasiado grande para la persona designada.


Que descubre que lo que se le exige,  le sobrepasa…



O, el otro “extremo”.

Que nos encontramos que debemos tener cita con personas que, en su extraño entusiasmo, piensan que pertenecen a la “Secciòn-hacedores-del-mundo”.


Si es asì, lindo “empuje”, llenarse de ganas, etc.; pero…

… Que la persona estè en el nivel de su cargo!.

… Sin…”Excesos-de-autoridad!.






Tampoco, una vestimenta, por disposición del lugar de trabajo, asegura la capacidad de la persona para desarrollar su trabajo.








Y muchos ejemplos màs.


Nunca sabemos con quièn estamos tratando…


… Los “conocimientos”, los vamos captando, identificando,  por “estratos-de-profundidad”:

El encuentro… El lugar… La presencia… EL bienestar o no de las partes y la envergadura de lo que se debe tratar… Si se està hablando un mismo… “Idioma”; o sea, si ambas partes saben sobre ese tema… La disposición de las partes para encontrar un resultado… Si hay voluntad para lograrlo y…

… Descubrir si se està tratando con la persona “idònea” para lo que se debe tratar.

Sino, la entrevista o tràmite, o lo que se presente, ha sido… Una pèrdida de tiempo!.

Aprendì que, según lo que deba realizar… Debo averiguar, muy bien, muchos detalles:

. Què es lo que se debe hacer?.

. A què lugar debo dirigirme.

. Con quièn debo contactarme… Y que sea la persona que corresponda.

. Ser clara, “breve” y puntual sobre lo que deba tratar.

. Identificar si el contacto ha sido productivo y el pre-resultado, si se logró.

. Dejar contacto…

… Y esperar que la persona contactada…

… Tenga el respeto y cortesìa de responder…


Los tiempos… Son importantes para todos.

… Se podrá tener horarios cargados, mucha actividad pero…

… Toda persona que hace honor a su cargo, actividad o lo que sea, debe tener en cuenta que, rara vez, son “vitalicios”…

… Debe, ante todo, cumplir con los protocolos de … “convivencia”!.


No importa què cargos, actividades y demás tengamos o desarrollemos…





Sino…

Que los hagamos… “Bien”!.


ADRIANA GROSSI

      11/08/14