¿Podría, Usted, trabajar con otras personas, que casi pertenecen a un mismo "Rubro", pero que pertenecen a distintas "Instituciones?.
Es asombroso cómo reaccionamos, instintivamente... Y se nos nota!.
Podría enumerar infinitos ejemplos:
En Turismo, cuando hay una presentación de un Operador Turístico, cuyo deseo es ofrecer para la venta su producto; invita a varios representantes de Agencias de Viajes. Los recibe con una sonrisa y... Cuando quiere acordar, el Salón se va transformando en un muestrario de "islotes" afines en tendencias-de-venta y es testigo de antagonismos profesionales.
Podemos, también, mencionar, en el "Rubro" Gastronómico. En la ciudad,hay una peatonal donde deben convivir, pegaditos, muchos negocios afines. A veces, me pongo a observar la reacción de sus integrantes: Los empleados que están al "salto" para "capturar" a algún potencial cliente y se avalanzan a su encuentro, "presionando" por convencerle que ha llegado al mejor lugar.
Ni hablar de las distintas Fuerzas de seguridad y afines, donde se nota como un antagonismo ancestral!. Se ve en las películas y en el diario vivir.
Aunque pueda haber respeto, hay ese "algo" que, íntimamente, se capta y que es más fuerte que cada una de las "partes"!.
Es importante, Sí, amar lo que se hace y defender la calidad de lo que se representa.
Pero...
¿Qué nos pasa que, cuando encontramos a integrantes de otra área, sección, Institución, etc., nos ponemos en "guardia"; aunque, tal vez, pertenecemos a un mismo "Rubro"?.
ADRIANA A. GROSSI PSICORIENTÓLOGA
18/03/12
